Los dolores de
cabeza son aquellas molestias físicas que aquejan a los seres humanos; muchos
médicos solo recomiendan el consumo de medicamentos que cada vez van
convirtiendo a más persona en dependientes, logrando solo calmar la molestia momentáneamente. Pero como
culparlos a ellos si fue a eso para lo que estudiaron y es también a eso que
asiste el paciente al consultorio. Debemos tener claro que los síntomas somáticos no siempre
son causados por motivos biológicos, ya que en ocasiones se pueden presentar
síntomas como resultado de diferentes situaciones.
Cada paciente puede llegar
con un síntoma diferente y por ende su proceso va a serlo, de igual forma, para
llegar al fondo del motivo de consulta se debe conseguir una muy buena historia
clínica del síntoma o del problema, independientemente de las creencias o
inclinaciones que se tengan, ya que se pueden encontrar casos en los que el
síntoma es proyectado desde otro familiar o ser querido, lo cual puede estar
ligado a situaciones específicas o puede que todos presenten el mismo síntoma
por el estado homeostático afectando a cada individuo. Cuando
el dolor de cabeza que posee un paciente afecta a toda la familia esta sufre un
desequilibrio, la dinámica familiar es afectada de muchas maneras, aumenta la
tensión en el núcleo familiar; provocando que el médico cree o se involucre en
ese malestar que aqueja a la familia, creando un sistema dinámico entre la
familia de paciente y él.
Esta imagen explica lo
dicho anteriormente, la mayoría de pacientes presentan lo que ellos consideran
que son síntomas físicos y por lo tanto, el clínico tiene que considerar hasta
qué punto se debe investigar esto, ya que puede haber una “dimensión familiar”
del problema.
Es aquí donde comienza una
labor ardua del médico por encontrar las causas de esta molestia. Por así
decirlo se convierte en un psicólogo-empírico con conocimientos científicos en
medicina ya que realiza cierta cantidad de entrevistas y análisis de las
situaciones por las cuales está pasando el paciente, pero no solo el médico
tiene el deber de investigar que sucede el paciente también puede auto evaluarse y darse cuenta de que sucede antes de que el dolor aparezca, que situaciones lo
llevan a eso, y en qué circunstancias. 
Lo que cada persona hace
afecta a cada uno de los otros y se produce una reacción en cadena y esta
tiende a la repetición, es como el efecto dominó.
La familia
juega un papel muy importante, al ser sistema frágil y cambiante con cualquier eventualidad
tiende a desequilibrarse, al estar un miembro de ella afectado por un malestar
es necesario que se efectuase unos cambios que para la familia no son fáciles
de realizar, por el miedo a lo que pueda suceder y a cómo quedaría la familia o
más bien la dinámica familiar.
Mirar a la
familia como una fila de fichas de dominó no sería tan loco ya que si la
primera ficha se derrumba sucesivamente se van cayendo el resto, esto mismo le
sucede a la familia cuando un miembro de esta se aqueja por un malestar, los
demás miembros se ven afectados. En la familia existen los límites impuestos por los
cuidadores, los roles y las normas que se deben cumplir para su buen
funcionamiento.
